
Pronto el club atraviesa dificultades económicas que derivan en un plante orquestado por los pesos pesados del vestuario. El presidente, Ricardo Oliva, dimite y toma el mando una Junta Gestora que establece un plan de pagos a los jugadores que éstos no aceptan. La huelga queda fijada el día 4 de abril de 1976 en un encuentro que ha de medirles en su propio terreno de juego con el Huesca. Toda la primera plantilla salvo el portero, Francisco Romero, acude ese día al campo de paisano, adquiere su entrada y presencia como los juveniles del club pierden (1-9) con el conjunto oscense. Dos de los jugadores, incluso, intentan acceder durante el partido a la sede del club para buscar un dinero con el que paliar la deuda contraída con ellos.
La huelga, lejos de solucionar los problemas del club los agrava y hasta siete de sus jugadores, Guerra entre ellos, resultan sancionados con seis meses de inhabilitación. Tras la suspensión, Guerra juega en conjuntos de menor categoría como La Cava o Torredembarra para posteriormente convertirse en entrenador de equipos como el Reus Deportivo o Nastic de Tarragona, entre otros.
Fuente: 'La Primera Huelga del fútbol español'; José Ignacio Corcuera. Cuadernos de Fútbol, nº64; 1 de abril de 2015.
Foto: José Luis Guerra/ www.bdfutbol.com
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